Deja que tu carta de presentación hable por ti


Tu currículum está listo y estás a punto de enviarlo al contacto que ofrece la vacante de tu interés, pero ¿no sabes qué escribir en el cuerpo del correo?

Hace no muchos años, se buscaba trabajo con el periódico (y las vacantes circuladas con plumón) bajo el brazo. La entrega personal de nuestro currículum, ofrecía la oportunidad de ser nosotros mismos quienes diéramos la primera impresión.

Hoy en día, la entrega de estos vía correo electrónico, es la oportunidad de proyectar una buena imagen, previa a la que se llevarán al leer el “archivo adjunto” que trata acerca de nuestra trayectoria profesional.

La carta de presentación

Llegó el momento de que en una breve descripción te presentes, muestres interés y destaques.

El cuerpo del correo funge como una “carta de presentación”, la cual tiene la función de marcar la diferencia con los demás aspirantes y posicionarte a la delantera de conseguir la entrevista laboral.

Si la redactas de forma efectiva, el reclutador notará tu interés, formalidad y profesionalismo. Toma en cuenta las siguientes recomendaciones cuando llegue ese momento:

  • Sé conciso. Redacta párrafos cortos y separados, con frases sencillas y evitando las palabras rebuscadas. Recuerda que hay muchos otros correos además del tuyo y que el reclutador probablemente no tendrá tiempo de leer con detenimiento uno muy extenso.
  • Dale formato. Inicia con una breve introducción y cuando sea el momento de detallar tus funciones, trayectoria o fortalezas, intenta hacerlo a forma de listado y con viñetas. Este modo de organizar la información es un descanso visual y una buena forma de atraer la atención.
  • Usa la empatía. Ya conoces las características que requiere la vacante. Si consideras que realmente cumples con los requisitos, repite conceptos que se mencionan en la descripción. Por ejemplo: Tengo “experiencia en atención al cliente”, he tenido la oportunidad de encargarme del “manejo de personal”, cuento con conocimiento de “inglés avanzado”, etc.
  • Muestra interés. El simple hecho de enviar el currículum supone que se está interesado, sin embargo no tiene nada de malo expresarlo abiertamente.

También puedes indicar que te consideras apto para el puesto. No se trata de exagerar, solo de mencionar que cuentas con las habilidades que se requieren.

  • Revisa tu ortografía y redacción. Redactar la carta de presentación y el CV, respetando la ortografía demuestra que les dedicaste tiempo y cuidado.

Hay  empleos para los que una buena ortografía es imprescindible debido a sus objetivos específicos. Aunque ese no sea tu caso, recuerda siempre que “Escribir bien significa respeto al interlocutor…” (Pablo Zulaica Parra).

Además de estas recomendaciones, es importante emplear un lenguaje amable y respetuoso, así como procurar no repetir lo que ya aparece en el currículum.

Si deseas conocer ejemplos de carta de presentación, descarga nuestras plantillas y úsalas para el envío de tu currículum vía correo electrónico.

UTEL Editorial

Haydeé Jaime López

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